El alma, ese ser etéreo que ocupa los cuerpos, es caprichosa
y escurridiza. No le gusta al alma estar encerrada, como el genio de la
lámpara y por eso, cuando la materia muere, emerge gozosa como un pajarillo a
quien le abren la jaula, para deambular a su libre albedrío.
Puesto que el alma es independiente, el presidio en un
cuerpo le resulta espantoso y aprovecha la menor ocasión para salir pitando, pero, si el organismo está vivo, sólo puede hacerlo con el estornudo. Es esta
exhalación la llave para abrir la puerta y no es la gripe, ni el polen, ni el
polvo lo que la provoca, como se cree; es el alma que cosquillea en esa frágil
membrana que tenemos dentro de la nariz, con la esperanza de provocar el
espasmo libertador.
Gracias a que tenemos la clave para que no huya como alma
que lleva el diablo, —que a veces se la lleva aprovechando la ocasión.
Jamás dejes de pronunciar las palabras milagrosas cuando
oigas retumbar un estornudo y más si es el tuyo: ¡Jesús! ¡Salud!
Me lo reveló mi abuela, palabra por palabra, que se lo había
confiado la suya, tal cual.
Hasta hace algún tiempo, todavía aquí
ResponderEliminarte decían ¡salud!. Cayó en desuso.
Gracias a tu confidencia, ya no pondré
un pañuelo en mi boca cuando estornude,
no importa si por esto escupo a todos,
solo me ocuparé en apretar mi nariz,
será mas efectivo, ya que las palabras
mágicas las dices después del estornudo
y si este es repetitivo ¡no tendrás tiempo
de pronunciar el conjuro!.
Besotes Espumosa
Sabiduría de abuela, cuanto hemos desaprendido con los años.
ResponderEliminarBesitos alma mia Espumosa.
Aquí en Andalucía es "arma" ¡Mi arma! Un beso mi arma...
ResponderEliminarBueno Mabel y Gladys, no hagáis mucho caso tampoco, que esto en realidad no me lo dijo mi abuela, sino que me lo inventé, pero hubiese sido bonito que me lo dijera.
ResponderEliminarPitu ¿mi arma? jajjaa, no de armas sino de almas, jajajaja :))))
Los andaluces os gusta cambiar letras y comérselas si es menester.
Los canarios pasamos de la z, por ejemplo. No pronunciamos la z y a veces ni la c, sólo lo hacemos si lo pensamos, así, decimos "corasón" y es un problema cuando hablamos de casa, porque si la conversación no lo clarifica, no se sabe si estamos diciendo de "caza" o de "casa"-Me encanta la diversidad de los lenguajes que tenemos en España o mejor dicho "el habla".
Besotes mil