FINALES SORPRESA
Los hechos se van encadenando de manera espontánea, hoy brota un puntito verde sobre la tierra, asoma su cabeza, se regocija al sentir el sol y la lluvia sobre su cuerpo, luego tiene un tiempo para dar de sí, algunos se imponen, dan origen a revoluciones universales, otros se conforman con estar ahí, pero todos, absolutamente todos, un día se sienten incómodos y desean volver a hundirse en la tierra de la que brotaron. Por eso no creo en los finales sorpresa, sin embargo no puedo evitar sentir que algo se ha roto en mi.
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Nunca le dijeron que todo era finito. Tampoco se molestó en averiguarlo... Intentó brillar más que las estrellas, cambiando de aspecto... Huyó a la niñez, encerrado en su propio castillo de fantasía. Todo inútil, fue creciendo, al tiempo su talento se estancaba. El Tiempo y La Muerte habían vuelto a ganar la Guerra de la Existencia.
ResponderEliminarGladys, qué bien que traigas esta reflexión.
ResponderEliminarAl final de todo, cada una de las personas populares se nos impregnan en la piel de manera que parece que las conozcamos de cerca y que pertenezcan a nuestro círculo más íntimo.
Como juguete roto que fue, todos hemos seguido más o menos la trayectoria de Jackson, hemos vivido con frustración los diferentes episodios de acusaciones -falsas o no- sobre sus tendencias o gustos, sus éxitos, sus estrambóticas posiciones... en fin, llegan a ser un poquito parte de todos nosotros, con lo que es lógico que exista una prolongación de emociones el día que nos dejan así, sin avisar, de repente y siguiendo una tradición de mito, dramáticamente.
Yo también lo siento porque sin ser una "fósfora" acérrima, me ha acompañado como parte de una época y con su desaparición probablemente también se esfuma paralelamente esa edad que me tocó vivir con su música y su baile.
Un beso
Qué bello escrito escribiste, Gladys…
ResponderEliminarUna vez alguien me dijo que llega un momento en que uno mismo quiere morir o mejor dicho, debe morir, y lo aceptas porque es la ley de la existencia; quizá porque uno cree que ya ha hecho todo lo que tenía que hacer, tal vez porque han muerto la gente que te acompañaba en el camino de la vida, siempre excusando a los hijos, ya que ellos, por lógica, deben vivir su existencia, como uno ya ha vivido. No sé, pero quizá es cierto y cuando se llega a una edad uno sabe que ya finalizó su etapa.
Michael se fue joven aún, por lo que, siendo lo que era, imagino que el mito será extraordinario.
Descanse en paz.
Muy buen escrito, Gladys. Sobre Michael Jackson, para mí ya había muerto hace muchos años, siempre lo vi como dos personas. La primera fue ese cantante maravilloso que me deslumbró a los trece años y me tuvo apasionada con su música y su carisma por un buen tiempo más. Y la otra, el que se deformó voluntariamente, el que pagó para alejar de él las acusaciones de pedofilia, el que se casó y compró niños para distraer la atención de su pederastía.
ResponderEliminarEn fin, no hace falta que diga que me quedo con el primero. Lo guardo en mi memoria, y en él pienso cuando oigo la música que me retrocede mágicamente a mi más tierna pubertad.
Siento en sus comentarios que estamos unidos, que de alguna manera todos sentimos lo mismo ante la muerte y especialmente sobre la muerte de alguien que directa o indirectamente nos afectó. Porque la música es el latir de la vida y mientras estemos vivos la disfrutaremos, aunque ahora se nos tiña de tristeza.
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