Sueños que se rompen y se trasforman en pesadillas que un día tuvieron su existencia en tu cabeza.
Mi mente atormentada ya no diferencia entre realidad y delirio, sumergida en un mar de sangre en el que voy chapoteando con desespero para llegar a la orilla de la desesperanza.
Y yo saltando desde un alto trampolín al que observo con vértigo. Y en el que aterrizo en una inmensa piscina cristalizada donde millones de cristales se introducen por mi cuerpo y me mutilan, me llenan de llagas.
Las llagas y los cortes van ensangrentando mi cuerpo, van vaciando mi alma gota a gota en el recipiente del idealismo, hasta pudrir todo lo que queda de mi ser, explotando desde dentro de mi interior, calcinando mis entrañas , dejando al descubierto solamente mis huesos roídos para que pueda lamer de ellos el sabor del fracaso de mi destino.
Y los huesos con el tiempo mutaran en nubes polvoreadas y polvo al polvo…
Mundo, existencia y ser derruidos por el pecado del destino, de haber nacido en un mundo donde no hay lugar ni sitio para un alma errante que vaga andante, perdida y sola, en busca de su destino…
Autora: Kel Báthory
Kel, mucho mejor, mucho más elaborada la gramática y la ortografía, aunque el estilo sea otro, menos fantástico y más autobiográfico, por lo menos en la forma.
ResponderEliminarQuiero seguir leyéndote cada día más porque tienes mucho que decir.
Un peldaño más y tus metáforas serán cada vez más exquisitas.
Besos primaverales
Y si me descuido, no digo "más" jajajajajaa
ResponderEliminar;-)
Muy bueno, Kel, me encantaron las imágenes que pude ver el texto, creo que debe leerse con lentitud para poder saborearlo.
ResponderEliminarSólo fíjate en algunas redundancias, pero fuera de eso, me pareció muy logrado.
Excelente, vamos haciendo de esa negrura vital un punto artístico. Pero que no te confundan las cosas. Una cuestión es escribir y otra es vivir. Como han dicho las anteriores chicas... Sigue así...
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