Nuestras vidas tomaron distintos caminos y yo seguí el mío como cualquier otro hubiese hecho. Los años pasaron, las arrugas se me pegaron en la piel y nunca más la volví a ver hasta caer la noche de hoy, que fue cuando el destino me sonrió. La crucé mientras estaba yendo hacia mi casa y ella hacia la suya. La alegría fue mutua, el diálogo casi obligado y la mujer que mucho antes había sido mi novia y de la que tanto me había arrepentido al dejarla, se dejó llevar por la situación. Yo me dejé llevar por ella. Subimos hasta la cima de mi cama donde nos desnudamos de ropas, de compromisos, de vergüenzas y de arrugas. Hicimos el amor con los ojos cerrados y al abrirlos nuevamente yo me encontraba en el baño y ella ya no estaba. Así de cruel puede ser la imaginación de un hombre.
(Mini encontrado en el 20 minutos de hoy)
Ay! de aquellos amores que no fueron y vuelven a su ser en la soledad de la memoria.
ResponderEliminarMejor cambiar de baño, antes que perder el recuerdo de aquello que nunca fue.
(Mini sacado de la manga)
Pues es mejor la imaginación que el vacío, nada como un buen recuerdo con todo su sentimiento. Un placer tu mini, Enfero.
ResponderEliminar¿se puede decir que sea un mini en estos tiempos de internet? supongo que tal vez ya no. Pues un placer tu relato, lo disfruté.
Un gran amor en un mini fantástico Enfero.
ResponderEliminarYa los minis no son minis y cada vez hay más minis grandísimos. Hola ha todo el mundo , ya he vuelto.
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