El sueño, perfecto.
La planificación, deseada.
El rendimiento económico, ideal.
La expectación, desbordada.
Y sin embargo los jefes de seguridad no son capaces de ver el beneficio para la
ciudad en estos tiempos de crisis...
Una a una susurraba cada una de estas frases como una letanía... No daba crédito que aquella masacre hubiese ocurrido en un país tan organizado; en su propia casa. Menos aún que él mismo fuera uno de los responsables. Había comprobado en sus propias carnes la Soledad del Poder.
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Salud y fuerza
jueves, 29 de julio de 2010
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A mi este texto me parece muy interesante. Ni le falta ni le sobra: frases cortas pero condensadas, concepto bien resuelto y firme. Directo, sin remilgos, capcioso... muy en tu línea, camarada, digo llamaradas... jijijiiji
ResponderEliminar¡Chiquitín!