Os dejo con un mini de Mario. Estoy triste, como si se me hubiera muerto otra vez el abuelito que de pequeña me enseñó a leer, a escribir, a observar y a criticar...
Su amor no era sencillo
Los detuvieron por atentado al pudor. Y nadie les creyó cuando el hombre y la mujer trataron de explicarse. En realidad, su amor no era sencillo. Él padecía claustrofobia, y ella, ágorafobia. Era sólo por eso que fornicaban en los umbrales.
Mario Benedetti
Despistes y franquezas (1989)
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Sigilosamente se aproximó a la cabecera de la cama y con sencillez y dulzura, le tendió la mano. El, mirándola directamente a los ojos la tomó, con toda tranquilidad se levantó del lecho agonizante, alejándose por un pasillo infinito, en el que sus propios personajes le rendían sentida admiración y respeto, susurrando al unísono: ¡¡¡RESISTENCIA!!!
ResponderEliminarUn bello homenaje al maestro, de la aplicada discipula en los minis relatos. Todos estamos un poco más tristes hoy.
ResponderEliminarHasta siempre Mario.
Me encantan esos micro-mini-chiqui.
ResponderEliminarHe puesto un concurso de micro-relatos vigente.
Anda, presentaos, que merece la pena intentarlo...
Marae, se agradece el homenaje.
Benedetti no sólo era un poeta, era un referente, un escritor de culto.
Personalmente, no lo he seguido más que a otros porque suelo tener predilección por la literatura española en todos los ámbitos, pero no dejo de reconocer su valía internacional y su sencillez para llegar a todos los corazones.
Espero que esté lloviendo en algún lugar para dar forma a la tristeza de su partida.
Besos de hoy
Lo importante es que haya vivido tantos años y nos haya dejado tal legado.
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