
Por primera vez se paró a pensar en todo lo que le había sucedido a lo largo de su vida. Su conclusión fue evidente, no había sido lineal. Muchos rodeos y retrocesos. Y sin embargo tenía ya un cajón medianamente importante de recuerdos. Comenzaba a formar parte de la Historia. Su propia historia.
Hermoso. Los recuerdos se engarzan en nuestro corazón y construyen ese yo que a veces nos gustaría dejar por un ratito a un costado.
ResponderEliminar