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Salud y fuerza

martes, 8 de enero de 2013

Palabras del alma








Apreciados y queridos amigos míos, un enorme abrazo a todos.

Hemos pasado unas fechas muy malas, una persona muy querida de mi familia se fue al Cielo, necesitaba poner algo aquí de mis sentimientos, como para compartirlo con ustedes, porque siento que realmente sois mis amigos, ¿virtuales?, ¿qué es eso de virtual? nadie es virtual, ustedes estáis ahí, con vuestra alma, vuestro corazón y vuestro cuerpo y mente, por lo tanto no sois virtuales, sois personas, ¿cuántos años llevamos ya "hablándonos"? entonces sois mis amigos ¿no? si no fuese así, no hubiésemos seguido en contacto, algo tenemos entre nosotros que traspasa lo meramente virtual.
Quiero que sepáis que hemos pasado en mi familia muy malos momentos, en estos días, pero que sepáis también que estos días mismos, nos hemos apiñado como hacía mucho tiempo que no lo hacíamos y quiero que sepáis que ahora mismo tengo el alma tan inmensamente llena de paz y de armonía como hacía muchísimo que no la tenía,  y que al presente y  a pesar de que sé que volverán los días de retornar  a la realidad material, tengo que vivir y sentir dentro de mí estos momentos tan inmensos, tan llenos de paz interior y de amor, me siento a pesar de todo el dolor, sobre todo el dolor de ver a mis personas queridas tan tristes, que estamos ahí, que tengo una gran familia, y que debo cada día dar gracias a Dios por ello, que  quiero a mi familia muchísimo, que he dado algo de mí, que aunque fuese poco, que me parece poco, lo he dado con el alma, y he recibido de ellos tanta armonía, tanto amor, en agradecimiento en estos días. Ellos me dan las gracias por estar apoyándoles, pero yo creo que debo yo darles las gracias a ellos por hacer aflorar en mi alma tanta concordia, por darme cuenta de cuánto los quiero, no tienen ni idea de cuánto me han dado en estos días, me han alimentado el  corazón con puro amor y yo creo que hice lo mismo con ellos, es algo que no sé explicar con palabras, sólo con decirles que les quiero, pero con el enorme sentido que esas palabras significan, les quiero, les quiero, y espero que siempre que me necesiten pueda estar ahí, no fallarles nunca al menos en lo primordial de la vida, no porque quiero que me lo agradezcan sino porque deseo que estén bien, que sientan que existe el AMOR, realmente existe y aunque a veces se duerma, no muere, nunca muere, el AMOR cuando es verdadero quizá se amodorre pero salta como un fuego pirotécnico  para llenar todo de luz en los momentos importantes y eso nos pasó a nosotros. Cuando el dolor era tan inmenso, tan difícil de soportar, floreció el amor, la amistad, el cariño, y llegó enorme, pleno, grandioso, para colmarnos el alma de paz y avenencia,  lo juro, os lo juro que es así, porque yo lo viví junto a ellos.
Tengo ahora mismo el corazón tan lleno de afecto, que me salen las lágrimas solas, y son lágrimas de complacencia, pero de esa complacencia que sólo pertenece al alma,  es esa satisfacción que únicamente aflora en momentos muy especiales de la vida, y creo que son esos momentos en que el dolor conecta con el amor. No sé cómo explicarlo, pero creo que esencialmente me entendéis.

Descansa en paz, J. M. te fuiste pero sabemos que estás en algún sitio mejor, y mira tú qué bueno, nos llenaste de amor a todos con tu marcha, igual que hacías cuando íbamos a verte a tu casa, que nos invitabas con todo lo que tenías, y sabíamos que lo hacías, no por hospitalidad, sino porque nos apreciabas, como nosotros a ti. Descansa y llena a los tuyos de paz, que creo que ya lo estás haciendo y lo estás haciendo maravillosamente bien. Te lloraremos, porque te echaremos en falta, pero estarás ahí siempre, sobre todo en el corazón de tu mujer e hijos, y de todos nosotros, ¿Puedes saber ahora cuánto te querían? Más de lo que imaginabas ¿verdad? Muchísimo, muchísimo.
Gracias a todos los que nos acompañaron a los que nos demostraron su amistad y compartieron nuestro dolor.

Gracias.



4 comentarios:

  1. ¡Solo decirte que te quiero!¡El pitufo y el pitufito también te quieren por lo que me oyen de ti.!¡Montones de besos.

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  2. Mi Espuma, un abrazo muy grande. No hay distancias, ni mares, ni rios entre nosotros. Hoy estamos más cerca, te acompañamos en tu dolor y sentimos contigo. Llega un tiempo en que los seres queridos toman otro camino y nosotros quedamos a la espera. Vosotros que tenéis el asidero de la fé, quizás lo tengais un poco más fácil. Es lo mismo, el dolor llega profundo y el consuelo es díficil. Con los años sabemos, que los días siguen su curso y cuando nos calienta el sol de invierno, damos gracias a la vida, sin prisa, recordando a los seres queridos que se nos adelantaron.
    Besos.
    Piedra

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  3. Mi querida Dori, aunque soy la última que entró
    a este grupo, os siento mis amigos reales. Si
    fueramos virtuales, no sentiría como propio tu
    dolor y tú no mostrarias tu alma como lo haces
    con tan sentidas palabras. Te quiero mucho y
    te mando besos y abrazos muy muy fuertes!!

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  4. Gracias amigos, sé que estáis ahí, y eso se agradece.

    os envío un fuerte abrazo.

    Pitufina, Piedra, Mabelita, ¡cuántos besos os estoy enviando! :)

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