Una fiesta más... Otro encuentro casual... No hay nada preparado... Presentaciones de rigor... Música en y para la calle. Miradas cómplices... Juegos sugerentes de palabras... Primeras caricias...
Tiempo después Ana y Pedro fuerzan un encuentro, con otros amigos, en una nueva Verbena.
Esta está un poquito desinflada, cuchi cuchi... aprieta los machos.
ResponderEliminar:-P
Vaya que se lo pasan bien con sus verbenas! Si me dan ganas de estar allí! Pero por aquí las fiestas masivas se han vuelto patrimonio de los adolescentes y gente muy joven, es tanto el alcohol y juerga que ronda que los más viejecillos preferimos quedarnos en casa.
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