
Siempre quiso ser una vedette. Todos los años en carnaval se vestía de mujer fatal. Con el tiempo descubrió cómo podía combinar su sexo de hombre con su espíritu de mujer con glamour. Hoy es el tercer año que celebra los carnavales de una forma completa. Su trabajo en Roma ha satisfecho con mucho todas sus espectativas. Es una Eminencia.
Definitivamente Enfero: el texto anterior de Jimul refiere a un obispo LITERALMENTE.
ResponderEliminarReconozco tu acierto... ja ja ja
Jejejejejee con todo mi respeto, pareces guionista del intermedio amigo Jimul.
ResponderEliminar