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Salud y fuerza

sábado, 24 de octubre de 2009

LA EXCESIVA AMBICIÓN MATÓ A LOS HOMBRES





(CUENTOS RELATADOS POR EL SR. ABDALA SADDI - CÓRDOBA)

Salieron tres ciudadanos a buscar leña y cuando estaban destroncando el árbol seco se encontraron con un cofre que contenía un tesoro en piedras preciosas. Ante la agradable sorpresa y después de la emoción lógica, pensaron qué hacer y como, ya que si las autoridades se enteraban, podían llegar a confiscarlos; también estaba el peligro de que se lo roben si la gente se enteraba.
Pensando como hacer, deciden que uno vaya a buscar comida y los otros dos se quedaron; sortearon y el que fue por la comida decide envenenarla y eliminar a sus socios, estos lo esperaron con planes para matarlo y repartir el tesoro entre dos. En suma, el que fue por la comida es muerto, y sus compañeros comen hasta morir envenenados.
Un sabio reflexionó sobre la historia y dijo que la excesiva ambición mató a los hombres, el tesoro sigue esperando que la estupidez humana siga por parámetros menos egoístas, crueles y extremadamente ambiciosos.

6 comentarios:

  1. Así somos sin remedio.
    Qué difícil es confiar en alguien de verdad.
    En algún sitio viene la reflexión de "Cuesta una vida ganar la confianza y un segundo perderla".
    Y así es.

    Gracias Jim. Somos cebollos y hemos de repetirnos las reflexiones varias veces al día.
    ;)

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  2. Son estos árabes, los antiguos, que eran muy observadores en la vida cotidiana. Ahora tanto árabes como cristianos y etc, etc... Miramos por encima y no vemos lo que hay alrededor...

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  3. A veces me pongo a pensar en algo que es un tanto difícil de explicar. Y es que he notado algo que me intriga: cuando se trata del individuo, la sociedad tiende a tener un optimismo que raya en el absurdo y lo infantil. Todo es bonito y todos seremos felices por siempre con sólo quererlo. Pero cuando se trata del colectivo, de la sociedad en su conjunto, todo se pone apocalíptico, y resulta que vivimos en un mundo monstruoso que más valdría que explotara. Y entonces me pregunto ¿cómo pueden los individuos vivir tan descosidamente felices en un mundo tan horrorosamente miserable?
    Me he planteado eso varias veces, y este cuento me lo recordó. En mi opinión, el optimismo sobre el individuo es simplemente absurdo. El fatalismo sobre el mundo tiene más de real, pero también está un tanto exagerado.
    Y ya no les doy más lata...

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  4. Tienes razón Nofret. Hay reflexiones un tanto extrañas y realidades que también lo son. Por ejemplo, el individuo por naturaleza, es honrado pero el colectivo no; el colectivo es mucho más malvado, más vampiro y más deshonesto.
    Y uno se pregunta por qué, cuando el colectivo está compuesto por individuos... ¿no te parece? La verdad, es extraño...

    :-I

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  5. Partiendo de la base (opinión muy personal) de que la Raza Humana, no aporta nada a este planeta más que problemas y miserias... Pienso que la masa es irracional por sistema (por eso se maneja también) y la individualidad, en el mejor de los casos, son rasgos positivos de los que deseamos empaparnos día a día. Dicho esto, yo siempre buscaré el porqué de la esencia del ser humano, aunque no llegue a encontrarla nunca.

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  6. Muy interesantes sus opiniones, me gusta tanto charlar con ustedes ¡pero nadie quiso participar en el foro! buaaaaaa! :´(
    Y sí que es extraño, Enfero. Tal vez sea que los individuos que llegan a dirigir a las masas son, generalmente, gente de la más baja calaña. De ahí vendría la irracionalidad de las masas, de la que habla Jimul.

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